Por Nicolás Carbajo.
La frase completa que indica el título es “por qué falsear, si ser uno es ganar” (“Se Vos”), y hoy que me invade una profunda tristeza por el fallecimiento de Ricardo Iorio, es una frase que lo pinta de cuerpo entero.
Si hay algo que me enseñó Iorio fue que lo más importante es ser auténtico, algo que Ricardo, como no podía ser de otra manera, predicó con el ejemplo.
Iorio fue el padre fundador del Heavy Metal Argentino o, como le gustaba llamarlo al propio Iorio, del “Metal Pesado Nacional”, siendo la autenticidad la característica que define al género. Porque el heavy metal no es para todos. Si no te gusta la música pesada, es una música que te expulsa, entonces no está hecha para complacer a terceros, es música que se toca por el gusto propio y si ese gusto es compartido por otros, buenísimo, cuanto más seamos mejor, pero nunca los heavies vamos a cambiar lo que nos gusta a nosotros por complacer a otros.
Y si la música de Ricardo era auténtica, qué decir de sus letras donde el no traicionarse a uno mismo ha estado permanentemente en su pluma. “Sigo intentado junto al pesado metal, llegar a quien lo siente, mandando de frente mis verdades” (“El Amasijo de un Gran Sueño”); “Sin perseguirme mando yo mi parecer, y que reviente, se manque o se aguante quien no es conmigo” (“1999”); “Que no te devore el mundo, poniéndote el antifaz” (“Tú Eres Su Seguridad”), son algunas, de muchas más, de las frases han ilustrado su obra.
Pero Iorio también me enseñó a desconfiar de aquellos que no se enojan nunca, de los conformistas a los que todos les da igual. Todos tenemos una “bestia” adentro, y es la que nos muestra tal cual somos y siempre se espera que la controlemos, cuando justamente es lo contrario lo que deberíamos hacer para movilizarnos. A este respecto, durante los años de “Hermética”, en la tal vez más brillante etapa de su carrera musical, Iorio explica en “Vida Impersonal” “Ya no maltrates a tu animal, pues no lo debes vencer sino amar y salvar …” y continúa en “Tu Eres Su Seguridad” “Mata el miedo que guarda el animal, limpia el cuerpo, pues dentro de él estas, si buscas libertad, ya no andes por fuera, no, hombre de mil nombres nace ya”.
Iorio fundó V8, la primer banda de Heavy Metal Nacional, su primer disco “Luchando por el Metal” fue editado meses antes que el primer disco de Metallica (la banda oriunda de San Francisco, California, y probablemente el mayor exponente del estilo musical de todos los tiempos), por mencionar un caso paradigmático de la relevancia de su obra. “Un Paso más en la Batalla” fue el segundo disco de V8, y es también un disco determinante en el rubro.
A fines de la década del ´80, fundó “Hermética”, agrupación con la cual grabó tres discos tan indispensables como espectaculares. El mejor Iorio, el más lúcido lo tuvo Hermética. No hay canción de “La H”, como se conoció a la banda entre los fieles que no sea destacable. “Hermética”, “Ácido Argentino” y “Victimas del Vaciamiento” son los tres discos que dejó la banda antes de su disolución a mediados de los ‘90.
Tras la difícil separación de “Hermética” Iorio encontró tal vez a su mejor socio, el guitarrista Claudio Marciello y fundaron “Almafuerte”. Grandes canciones, grandes discos, entre los que destaco “Del Entorno”, el homónimo “Almafuerte”, “A Fondo Blanco” y “Piedra Libre”. Por una cuestión generacional, tuve la oportunidad de ver a Almafuerte varias veces en vivo, y lamento a aquellos que han perdido ese privilegio.
En los último años fue más “popular” por apariciones televisivas, pero les aseguro que el genio musical de Ricardo fue infinitamente superior al personaje entrevistado. No obstante, cada tanto dejaba alguna frase memorable como “Una cabeza desocupada es el almacén del demonio”; “Si son mas de cuatro arriba del escenario es porque tienen vergüenza” o “en el campo, donde hace frío la cumbia y su ‘menea, menea’, no pegan…”
Parafraseando al cántico que entonábamos sus seguidores en sus conciertos, que nadie tenga dudas, este 24 de Octubre de 2023, nos dejó “el más grande del heavy nacional”.
