Por el Dr. Felipe Martínez Pérez.
Parece un país en broma mientras el gobierno o lo poco que queda no quieren subir algunas papeletas que tenemos que pagar mensualmente y que mensualmente suben, pues algunos no quieren subirlas, pero el FMI “quiere que se suban para no dañar aún más las cuentas públicas”. ¿Dejará algún día de mandar el FMI en cada uno de los bolsillos de los argentinos? Y en consecuencia y dado como están las cosas, se podría columbrar que el poder o ente económico quiere que nos hundamos pero todos en masa, y no de a uno. Cuantos años escuchando las mismas tonterías sobre el Fondo porque los del fondo, o sea los de atrás, que siempre están en medio, se quedan con todos los dineros que llegan. Nunca he visto al Fondo indagar a dónde van los millones de dólares que tanto suelta a sus amigos, o eso parece, pues nunca he visto que pregunten que se hace con ellos, con los dólares ¿Qué hacen con los dólares los Hunos y los otros?
Porque cualquiera que piense un poco podrá ver con cierta rabia y tristeza que todos los millones y millones de dólares se los han comido veinte o treinta o sea, como sucede con la o él, que están al lado de la vaca y se toman la leche, pues hace veinticinco años que no se hacen vías ni trenes ni barcos ni aviones ni carreteras, ni nada de lo que se hace con los créditos. Quiere decir que nunca se dice nada pero supongo que pagan los intereses y algo más, pero curiosamente, lo otro, d para pensar que como nada se ha hecho se les ha perdido o se lo han quedado. Así de cierto. Toda esta caterva de inútiles que siempre habían sido piojos, resucitan, y tienen en estos momentos entre todos millones de hectáreas que son de todos; y sin embargo, a que el futuro economista va a EEUU y nada saca de por estos lados habiendo mucho más que por el país del norte y muchísimo más barato; ni siquiera hay que pagar intereses. Hay que extraer lo que es de la patria.
¿Qué hará Melconian además de la charla diaria con rebuznos diarios? Pues ya se ha visto que no se puede estar hablando todo el día porque al final al dirigente máximo de la Rural se le ocurre que se ha olvidado del campo. O sea, como dos niños de sexto. Porque el país no está para andar mojándose la oreja. De todas maneras, no se les ve pasta para meterse de lleno en el asunto, pues si tales cifras trillonarias no vuelven a las arcas, es que nada ha pasado. O sea, que en vez de pedir créditos cada uno en los distintos bancos para lo que sea, como cualquier hijo o hija de vecino, lo piden al Fondo todos juntos, y juntos, se lo trocean. Y no es poca cosa, lo que salta, porque ante lo poco y nada hecho, sucede que se comen los créditos del Fondo. Y riéndose a carcajada batiente. Por eso nunca hay dinero en los últimos tiempos.
Adonde hemos llegado por no haber querido adelantar las elecciones hace diez o doce meses, si lo hubieran planteado los radicales; y en otra cosa andaríamos ahora. Muy distinto, a la interminable angustia de tener que pasar cuatro meses más en una de las agonías más largas, mientras se escuchan las tabarras encendidas de cada uno de los que van a gobernar o desgobernar; que no lo sabemos. Pero dado que el dolor es causa principal y dada la cantinela del futuro ministro de economía, en vez de la cháchara que no está mal la propaganda; pero, también se podría haber llamado a los otros dos contendientes, más los demás que andan por ahí. Y por ejemplo, decirles ¿y si hoy mismo ponemos el dólar a seiscientos y seguimos trabajando cada uno por el futuro de la parcialidad y el futuro de todos? Que hubiera sigo algo fuera de serie, pero las ideas grandes parece no se dan en este país grande, que es de esperar, vuelva a ser un gran país. Y así nos va, todo ha quedado en un país grande y ajeno, que no es lo mismo. Y entre otras cosas, es de esperar, que después de las elecciones se echen a los indios truchos para conservar el terreno. Y al menos continúe grande.
Y por la otra vertiente, Milei da pena, porque el grito es de los que no saben hablar y las muecas son payasescas, y se las creen aquellos que han puesto pasta a su alrededor; y sin embargo, no se han enterado que la pólvora está inventada hace siglos y siglos. ¡Si lo sabrán las guerras! Pues parece que Milei lo inventa todo. Y no se dan cuenta que por el momento es un simple aprendiz de brujo, y si llega el caso, se verá que pasa. Y si no llega, pues estaríamos mejor, porque a pocos países les gusta tanto el suicidio colectivo como a este. Bastó que apareciera un lucecita femenina en el camino para que brotaran los carnívoros a destrozarla y para empezar de al ladito, nomás.
Y siempre se está empezando. Pero yo a todos estos pobres tipos les digo que una consulta médica vale tres o cuatro dólares, depende de la mutual y del día; y estos pobres tipos, no se han enterado que Argentina, entre otros, tiene tres premios Nobel en Medicina. Este es el país de hace un cuarto de siglo y antes era un poco mejor y esta acotación viene al caso para demostrar que los nietos y biznietos de los que hicieron esta Argentina bajo los designios de Sarmiento y Roca, son los que la están rompiendo hace un cuarto de siglo; y con una alegría que causa pavor. Que se dice pronto. Y no creo sea para aplaudir un suicidio colectivo. Y faltaba que además, los Hunos y los otros hablen como si fueran carreros, con perdón de los carreros.
