EL ASCENSO DE CIUDAD. Una definición y un título para el recuerdo

Un partido final friccionado, sin dueño, sin emociones. Y una definición infartante que culminó en la celebración de Ciudad de Bolívar. Esto se vio el domingo en el estadio único de San Nicolás, donde el Celeste escribió un capítulo único en la historia del fútbol argentino y más aún en las páginas futboleras de la propia ciudad.

El club pensado originalmente para el vóley, que dejó su huella en esa disciplina, hoy se anota con otro título nacional, pero dentro del deporte más popular. Ciudad igualó cero a cero con Atlético de Rafaela en la final del Federal A, y en la definición por penales se impuso por 5 a 4. Por eso, a partir del año próximo formará parte de la Primera Nacional, la segunda división del fútbol argentino.

Breve y riquísima historia deja el Celeste en su paso por el Federal A, categoría a la que arribó en 2021 tras ascender desde el Regional Amateur, pero esta temporada hizo méritos suficientes para dejar atrás a esta tercera división y seguir adelante en pos de sus objetivos. Fue contundente en su zona, pasó con éxito la fase campeonato y le tocó disputarle el título cara a cara a uno de los grandes, con más trayectoria, con más gente, pero exactamente con la misma ambición.

Ciudad y Atlético empataron cero a cero y a esta altura, aún resonando los festejos bolivarenses, no tendría mucho sentido explicar paso a paso cómo se dio el partido. Sí se puede mencionar que en los 90 minutos no hubo un dominador claro en el juego. En la primera parte, las dos situaciones más claras fueron dos cabezazos de Ciudad, de Caraballo y Navarro, que no fueron gol por falta de puntería.

En el complemento, Atlético tuvo un poco más la pelota, merodeó más el área rival pero no ocasionó peligro. Nunca pateó al arco. El desgaste de los minutos y la tensión cada vez más notoria hicieron que el encuentro no deje demasiada tela para cortar. El árbitro Juan Ignacio Nebbietti lo condujo bien y amonestó bastante como para llevar las riendas cortas del partido. Por eso mismo, para que no se le vaya de las manos, no expulsó en el arranque del juego al lateral de Rafaela Matías Martínez, a quien sólo le sacó amarilla cuando él mismo había observado un codazo sobre un marcador de Ciudad en un corner para los rafaelinos.

Para destacar, sí, es la decisión del entrenador Diego Funes de mandar a la cancha en el minuto 48 del segundo tiempo al juvenil arquero deroense Enzo Tomás Álvarez, surgido en Bull Dog, en reemplazo de Laborda. El DT pehuajense le tenía fe para los penales al pibe de 25 años -que el viernes había atajado en el estadio durante el partido entre Ciudad y Bull Dog por la Liga-, y la jugada le salió bien.

Los inolvidables penales

Lo destacado de la tarde en San Nicolás, lo más emotivo y para el recuerdo fue la definición por penales. Arrancó mal Ciudad porque a Pitu González, su emblema, le atajaron el primer disparo. Pero inmediatamente después Gabriel Fernández mandó la pelota afuera, por un costado, y siguieron cero a cero. El bolivarense Renso Pérez marcó el primer gol de la tarde, y Jorge Fernández puso el uno a uno. Nahuel Gery estampó el 2 a 1 pero Fernando Ponce igualó para la Crema. Brian Quintana erró el cuarto penal de Ciudad y Julián Fullana puso arriba a Atlético 3 a 2. Debía anotar sí o sí Luciano Lapettina para evitar la derrota y el 3 celeste no falló: 3 a 3. Sin embargo, Lucas Ontivero tuvo la enorme chance de convertir y darle el título a los santafecinos, lo cual no se dio porque su remate pegó en la base de un palo. Con la serie de cinco penales igualada 3 a 3 fueron a la serie de un disparo hasta definir. Allí también arrancó mal Ciudad porque la definición de Elías Martínez fue contenida por el arquero Emanuel Bilbao. Atlético estuvo entonces ante la segunda posibilidad de ser campeón, pero fue entonces cuando apareció el pibe de Daireaux Tomás Alvarez para ahogarle el grito a Ijiel Priotti y mantener a Ciudad en partido.

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La serie restante fue con goles, Gonzalo Schonfeld puso el 4 a 3 y el capitán Lucas Albertengo, que extrañamente pateó recién el séptimo penal de Atlético, señaló el 4 a 4.

Y la octava tanda sería la decisiva: Jonathan Maciel colocó arriba a Ciudad 5 a 4 con un disparo fuerte al medio del arco, y cuando le tocó el turno al ex River Facundo Affranchino la mandó por arriba del travesaño. Así Ciudad de Bolívar se consagró campeón, ascendió y se presenta como futuro oponente de clubes de enorme trayectoria en el fútbol de ascenso. Atlético de Rafaela, ahora, deberá buscar otra oportunidad en la Reválida. Fue la cuarta final consecutiva del Federal A que se definió por penales y esta vez la alegría fue toda bolivarense. Se cierra de la manera soñada por el club esta etapa de cuatro años en el Federal A. En el futuro inmediato, vendrá el tiempo de pensar en lo que viene, otra categoría, otra competencia y otro desafío.

SEBASTIÁN MEZQUIDA.