La capilla de la localidad de Unzué fue el lugar elegido para rezar por la memoria de Aldo “Cuqui” Castellani este domingo, en el marco de una misa allí celebrada por el Padre Alejandro Boudgouste.
El sencillo templo se vio colmado por las presencias de familiares, amigos, ex compañeros de colegio secundario de “Cuqui”, fallecido trágicamente el pasado 20 de junio en un accidente de tránsito ocurrido en la Ruta Nacional 14, cerca de la ciudad de Colón. Se encontraba presente la Dra. Julia María Sebastián, ex pareja del infortunado vecino, quien también fue víctima del accidente referido.
Se vivieron momentos de cargada emoción tanto durante el oficio religioso como cuando, finalizado el mismo, se plantó un palo borracho en el ingreso a la capilla y se colocó una placa que intentará mantener vivo el recuerdo de Cuqui Castellani. Según se dijo, se trata ésta de una especie arbórea preferida por Castellani y la propia capilla de Unzué uno de sus lugares de referencia ya que era habitual que éste la visitara periódicamente.
Ex compañeros de estudios de la Escuela Salesiana de Del Valle, algunos de ellos procedentes de diferentes ciudades y hasta del exterior marcaron una entrañable participación en el oficio, en tanto también resaltó la participación de integrantes de diferentes instituciones intermedias y de firmas comerciales vinculadas al quehacer agropecuario.
Finalizada la misa el padre Alejandro quiso que los crisantemos que adornaban en el altar fuesen repartidos entre los asistentes “para que no se marchiten aquí y sirvan para que cada uno le dé un destino de homenaje”. Uno de ellos lo puso en manos de Julia María, quien se encontraba contenida y abrigada por sus hijos, integrantes de su propia familia y la de Cuqui.
