Edoardo Ponti, su hijo y director, propició el regreso al cine tras once años de silencio de Sophia Loren, una de las más grandes actrices de la historia del séptimo arte.
El retorno es para La vida ante sí, que Netflix acaba de estrenar en el mundo, un emotivo film que podría catapultar a la célebre artista, que tiene 84 años, a nuevos premios y distinciones de la industria del cine, además del reencuentro con el afecto de un público que nunca la olvidó.
La vida ante sí es un drama sobre la inmigración; dura 94 minutos; dirige Ponti y junto a Loren actúan el debutante Ibrahima Gueye, Renato Carpentieri, Abril Zamora, Massimiliano Rossi y elenco.
En la costa de Italia, una superviviente del Holocausto que regenta un centro de día (Sophia Loren), acoge a un chico senegalés musulmán que le robó y vive en la calle. (Filmaffinity).
“Aunque sólo sea por la vitalidad, el porte y la maestría de la actriz [Loren], que consigue muchísimo con apenas unos mimbres, tiene visos de evento. (…) Luminosa, agradable, tolerante y esperanzadora a pesar de su temática”, opinó Javier Ocaña, del diario español El País, mientras que su colega Steve Pound, de The Wrap, consideró que “su corazón reside en la conexión entre un chico de 12 años y una mujer de 86, y Loren y Gueye hacen de esa relación algo suficientemente rico y conmovedor como para darle vida a la película que lo rodea”.
