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Tim Burton: el joven Manos de Tijeras

Colaboración Ariel Dadante.

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En 1990 llegaba a las salas de cines “El joven manos de tijeras” (Edward Scissprdhands), unos de los films más personales del director. La película protagonizada por Johnny Depp y Winona Ryder, se terminó convirtiendo en un clásico de los ´90.

A pesar de que Burton había realizado dibujos de un personaje con objetos afilados en vez de manos, muchos años antes de la película, basándose en su propia existencia mientras vivía en los suburbios. Pero el film tomó forma cuando se cruzó con la guionista Caroline Thompson (La familia Adams, 1991 y El Jardín Secreto, 1993), quién estaba trabajando en una historia al estilo de Frankenstein. En algunas entrevistas, Thompson declaró, que basó el personaje en un perro que ella tenía. Tim Burton apenas había visto algunos de los trabajos de Johnny Depp, pero lo eligió para interpretar a Edward por su “habilidad para actuar con los ojos”.

Antes de seleccionar a Depp como protagonista, Burton tuvo reuniones con Tom Cruise, por pedido de Fox, pero las reuniones no llegaron a ningún lado. Otros actores estuvieron en consideración, Michael Jackson intentó acercarse al casting, pero fue completamente ignorado, William Hurt y Robert Downey Jr., no pasaron las pruebas de casting. Tom Hanks rechazo el papel porque ya estaba trabajando en el film de Brian De Palma, “La Hoguera de las Vanidades” (The Bonfire of Vanities, 1990) y, por último, Jim Carrey estuvo en los planes, pero carecía de la experiencia dramática que requería el papel.

Durante cuatro meses, Depp pasó dos horas diarias en el departamento de maquillaje para cubrir sus cejas y aplicar las cicatrices. Tim Burton dijo: “algunas de las cicatrices eran reales, ya que hay un período de ajuste para el actor que está usando tijeras en sus manos”. Tardaban otros 45 minutos para meter a Depp en el traje de cuerpo completo de látex (y del que algunas de sus partes provenían del viejo sillón de Burton) que, junto con las manos de tijera, fueron creados con la ayuda del fallecido Stan Winston (Iron Man, 2008; A.I. Artificial Intelligence, 2001), experto en maquillaje y efectos especiales. Arreglar el cabello de Edward duraba otra hora.

La grabación se llevó a cabo en el vecindario real en Lutz, un pueblo en Florida. No fue una elección al azar, Burton lo escogió porque tenía un parecido bastante grande con Burbank, zona donde vivió en su infancia. Allí, la producción alquiló veinte casas en una calle sin salida y, las personas que vivían allí, fueron invitadas a quedarse unos días en hoteles o a participar como extras. Las casas fueron pintadas con colores pasteles, una vez terminado el rodaje, algunos propietarios decidieron dejar las casas con los colores que se ven en la pelicula y otros pidieron que las volvieran a pintar.

Al igual que pintar las casas, el equipo también tuvo que instalar muchos arbustos para que Edward esculpiera las figuras finales que aparecen en el filme, aunque éstas no eran reales, sino creaciones del departamento arte, hechas de estructuras de metal envueltas en alambre para gallineros y rellenadas con hojas artificiales.

El actor veterano del cine de terror, Vincent Price (House of Usher, 1960; The Fly, 1958) apareció brevemente en la película como el creador de Edward Scissorhands. Siendo un adolescente frustrado y solitario, Burton encontró consuelo en las películas de Price, tanto, que le envió el corto animado Vincent (1982), que hizo ocho años antes sobre un niño de siete años que sueña con convertirse en Vincent Price.

Tim Burton dijo: “No te puedo decir lo que él significó para mí mientras crecía. Esto suena dramático pero él me ayudó a vivir… Cuando eres niño y adolescente, es común pasar por una fase melodramática. Pero viendo las películas de Price, había una catarsis para mí. No sólo estás viendo una película de Edgar Allan Poe con bajo presupuesto, hay algo más ahí que no está en la pantalla. Yo dirigí mi melodrama hacia eso, en lugar del suicidio, probablemente”.

La historia de un joven que se transforma en toda una celebridad local gracias a sus manos de Tijeras, y su habilidad para usarlas, a cautivado a públicos generación tras generación, incluso a pesar de haber sido estrenada ya hace tres décadas.

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