No está confirmada la fecha, pero podemos adelantar que Luna y Fango se presentará en junio en la Biblioteca Rivadavia, lo cual en principio y en lo personal ha de constituir una gran alegría: hace tiempo que querés tocar en Bolívar, y con Luna y Fango, tu proyecto actual.
Paola Siervo, pianista, desde La Plata: -Exactamente. Si no es para junio será para principios de agosto, o julio. La idea es que estemos allá tocando, nos han invitado y estamos muy contentos. En lo personal, como decís, mucho más, porque quería tocar allá y con este proyecto. Hacía mucho que no lo hacía con ningún proyecto, pero sentía que de ir tenía que hacerlo con el trabajo que hago a diario, que es Luna y Fango. (NdR: el quinteto de tango actuó en el reciente Me Encanta Bolívar, en el marco de una grilla compartida con muchos grupos y solistas locales y con Soledad, con un show breve, de veinte minutos.)
Infiero que el auditorio de la Biblioteca es un lugar casi ideal para la propuesta de ustedes, por la acústica, por lo confortable y acogedor del lugar.
-Nos va a permitir también mostrar otro costado del quinteto. Lo que hicimos en el Me Encanta Bolívar fue elegir un par de temas para mostrar, con otro tipo de amplificación. Canciones que estuvieran al alcance de todos, más conocidas, no tal vez las óptimas para generar un momento íntimo, porque no queríamos detener la vorágine del festival. En el auditorio de la biblioteca se abren otras posibilidades de repertorio, tenemos todo un costado de repertorio camarístico ideal para mostrar allí.
A un festival van muchos públicos porque tocan muchas bandas, no necesariamente del mismo género. Al auditorio “María de Barnetche” concurrirá gente a verlos exclusivamente a ustedes, lo cual cambia las cosas.
-Sí. Y nos permitirá jugar con otro tipo de sensaciones, o por lo menos quedarnos en una sensación, y después de un rato ir a otra, porque tampoco vamos a trabajar un repertorio que produzca una intimidad permanente. Y además el tiempo: en el festival tuvimos quince o veinte minutos, no alcanzás a calentarte que te tenés que bajar. Ahora tendremos más tiempo.
MUCHO PIAZZOLLA
Mencionaste que abordarán un repertorio camarístico. ¿Qué piezas o qué autores podés adelantarnos?
-Hay un montón de obras preciosas de Piazzolla, como la Milonga del ángel, que es una obra que forma parte de Amalgama, nuestro disco. Es hermosa para escuchar acústica, vamos a tratar de tocar en formato acústico, sin amplificación, si es que el lugar nos lo permite tras la evaluación que hagamos en la prueba de sonido. Eso ya baja los decibeles de volumen, genera otro tipo de predisposición para la escucha, otro tipo de ambiente. Nos gusta mucho trabajar así. La milonga del ángel es ideal para ser tocada de esa manera. En el festival nos quedamos con ganas de hacer Adiós Nonino… Bueno, está Michelangelo 70. Hay mucho Piazzolla por hacer, que seguramente abordaremos en la biblioteca.
Años atrás, en la Rivadavia te has presentado en formato solista y con música académica, otra faceta de tu carrera…
-Sí, varias veces me he presentado. Empecé con la parte solista, con música académica. Luego me presenté en un dúo con violín; música clásica, con clarinete, con mi querido amigo Matías Bottinelli; hice cosas con piano a cuatro manos; después apareció Trifinio, que fue una búsqueda de música latinoamericana, una salida de lo clásico, con los mismos músicos pero otra propuesta. Y me falta ofrecer esta propuesta con la que vengo trabajando en los últimos años, ir con Luna y Fango, con el que hago tango, pero como siempre digo, al final siempre vinculado a lo camarístico.
Luna y Fango está integrada por Gabriela Maceira, en voz; Paola Siervo, en piano; Luis Carcacha, en contrabajo; Sandra Valdovinos, en violín, y Laura Cadabon, en bandoneón. Tienen base en La Plata, pero tocan en el país y el mundo.
Chino Castro
