Fernando Javier Álvarez, referente de Identidad Bolívar, distribuyó volantes y realizó difusión a propósito del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, que se conmemoró el jueves.
Álvarez montó su puesto durante la mañana en la esquina de la municipalidad, y a cada transeúnte lo invitaba a colocarse la cintita roja identificatoria de esta lucha mientras le entregaba un volante informativo.
“A mí me pega directamente el tema, ya que tengo dos hermanos fallecidos hace muchos años por esta enfermedad, muy temida otrora, como ahora ha ocurrido con el covid”, relató el dirigente social, abordado por este diario.
“No debemos dejar de ocuparnos de esta enfermedad, hay un gran índice de fallecidos por ella, si bien la Organización Mundial de la Salud posee un programa de trabajo que acabaría con el flagelo en el 2025”, más allá de algunas demoras que está sufriendo su ejecución, dijo Álvarez. “Se está trabajando mucho, y ya hay un caso de un paciente totalmente curado. Se está avanzando en tornar accesibles los costos de la medicación”, con lo cual de algún modo se cerraría un doloroso círculo de más de tres décadas.
En su momento, padecer SIDA implicaba una condena no escrita a ser segregado socialmente, y acompañando a sus hermanos el bolivarense atravesó “la peor época” del desarrollo de este flagelo, los años de su irrupción: “Uno de mis hermanos estuvo en el Hospital Internacional de Mar del Plata, lo mandaron a hacerse unos estudios y la gente no lo quería atender; recuerdo que el enfermero se negaba a aplicarle una inyección y en la farmacia no nos recibían”, recordó, aún con vestigios de un pesar que quizá nunca se diluirá por completo. Sus hermanos, también bolivarenses, eran Pablo Daniel y Ricardo Omar Álvarez.
“Mi intención hoy acá es realizar una contribución para que la lucha contra esta enfermedad se mantenga latente, para que no nos olvidemos” y continúen las investigaciones científicas para derrotarla, puntualizó Álvarez. “También sé que el estado trabaja en la materia; en Bolívar tenemos casos de gente que cursa la enfermedad y no está sola, el estado la acompaña y ayuda para que pueda alcanzar una cura definitiva”, completó el dirigente social.
Ch.C.
