Santa muerte sin orquídea, según libro de Lorena Marisol Mega, será presentado el miércoles a las 20, en el auditorio de la Biblioteca Rivadavia. “Elegí ese día porque el 20 de octubre de 2019 presentamos el primero, Costura a tendón. Funcionó bien, y entonces decidí respetar una especie de cábala, si bien a aquél lo dimos a conocer en otro espacio, el Cine Avenida”, dijo la autora a este diario sobre un compendio de prosas poéticas que elaboró durante la pandemia. Un volumen “más crudo, con más desparpajo”, que habla de “la manera de sentir y de doler que tenemos las mujeres”, y también “de parir”, pero no necesariamente en sentido físico.
El volumen está desplegado en noventa y nueve páginas, contando una en blanco en medio del recorrido, y cuenta con tres dibujos a color de Andrea ‘Tota’ Volpe, a quien también pertenece la ilustración de tapa, y dos textos invitados, de Mirian Alejandra Córdoba. El diseño corresponde a Dalmiro Zantleifer Ojeda. Editó Imprenta del Sur, de Nacho Bedatou, en el marco de un proyecto autogestionado por la autora, que será la encargada de la comercialización de su obra, cuyo valor es de 600 pesos (habrá ejemplares disponibles en miércoles en la biblioteca).
¿Qué diferencia a Santa muerte sin orquídea de Costura a tendón?
-Profundiza en el género, en la muerte y en lo que pensamos y sentimos las mujeres. No quedan excluidos los hombres, aunque está pensando en el género femenino, en la manera de sentir y de doler que tenemos las mujeres, esta cosa de que nos permitimos llorar, estar angustiadas, andar por el mundo con cara de enojo, y si tengo ganas de llorar todo un día lo voy a hacer. El hombre aún no se lo permite. No es que seamos más sensibles, sino que nos permitimos cada vez más cosas, y el libro está atravesado por cómo sentimos el dolor. Por eso santa muerte. Todo el tiempo está la muerte incluida, pero no la corporal, sino también la de todo lo que vamos duelando, lo que vamos perdiendo: un amor, un sueño, incluso una ideología, que en realidad cuando se pierden no se duelan (se ríe). Es un libro más crudo, te diría, tiene más desparpajo.
Dejaste una página en blanco.
-Sí, en el medio. Sentí que el libro necesitaba ofrecer un espacio para respirar. Además, en este me permito dedicar algunos textos, a diferencia de en el otro.
Santa muerte sin orquídea incluye tres textos más de Mega: la versión original de El duelo, La espera de consuelo, donde imagina la espera de la madre de Gody Álvarez una Navidad en la que su hijo no llegaría, y el micromonólogo Soy semilla. “El libro también habla mucho de parir, y no personas, sino lo que tengas ganas. Parir, que no siempre tiene que ver con lo físico, ni tampoco tenés que ser mujer para hacerlo. Yo hora estoy pariendo un libro, y podés parir una idea, por ejemplo”, puntualizó la escritora. “Sería hermoso que también los hombres se permitieran usar ese verbo, parir, que es una lindísima palabra”.
La presentación se llevará adelante bajo el formato de entrevista, similar al empleado cuando se presentó Costura a tendón. La moderadora será Daiana Jazmín Almeira, estudiante del Instituto Superior de Formación Docente y Técnica. Habrá además un micrófono abierto para la participación de sus compañeras del Profesorado de Literatura. Organizan, auspician e invitan la Biblioteca Rivadavia, alumnas de la citada carrera del ISFD Nº 27, con sus docentes Juan Cruz Pérez Remis y Magalí Barriga, y la vinoteca de Julio Russo, que proveerá los vinos para degustar en la ocasión. También se incluirá un segmento musical, con Clara Tiani y Nadia Marchione, que cantarán textos del libro musicalizados por Tiani. La entrada es libre y gratuita.
Con la gente de la Biblioteca Rivadavia Mega ha establecido una relación estrecha en estos meses, ya que allí ensayó y llevó a tablas El duelo, su obra junto a Nadia Marchione (en rigor, la pieza escrita y dirigida por Lorena había sido estrenada en noviembre del ’20, en Souvenir patio teatral), y se encuentra preparando otras dos de su autoría, que con dirección suya (en un caso compartida con Marchione) seguramente serán estrenadas en auditorio de la institución.
Chino Castro
