Muy pocas de las setenta y cinco localidades habilitadas por protocolo para el recital de El Quintete, quedan disponibles en manos de miembros de la Asociación Musical, la organizadora del espectáculo, que retoma mañana la actividad presencial tras casi dos años de silencio por la pandemia, período en el cual, y con un 2020 que asomaba pletórico de recitales ya programados, intentó, sin éxito, y dos veces, volver.
El conjunto olavarriense, capitaneado por la saxofonista y clarinetista Ingrid Feniger (ha actuado en Bolívar con otras formaciones) y que cuenta en sus filas con el bajista azuleño Quique Ferrari (ha tocado mucho acá, especialmente al frente de su trío), se presentará desde las 21 horas en el auditorio María B. de Barnetche de la Biblioteca Rivadavia (Las Heras 80). Las entradas tienen un valor de 500 pesos para no socios y 400 para socios del órgano anfitrión, y pueden conseguirse a través de las redes sociales de los integrantes de la Asociación o de los teléfonos 621901 y 626425. Se exigirá pase sanitario, barbijo durante todo el espectáculo y al ingreso a la sala se tomará la temperatura y se rociará las manos con alcohol en gel.
El Quintete tocará composiciones de Feniger y clásicos del jazz, volcado a lo contemporáneo. “Es la organizadora del Festival de Jazz de Olavarría, y tiene muchos contactos con los jazzeros de la escena porteña”, aportó María Marta Molfese, presidenta de la Asociación Musical, ayer en rueda de prensa en la biblioteca, acompañada por su par de comisión directiva, Nahuel Morante.
“Más allá del streaming y los formatos tecnológicos de hoy, la música en vivo”, con el público allí, es incomparable, afirmó MMM, como un modo de convocar al público a acercarse mañana. “Es otra experiencia, por el feeling que se da entre los músicos y los espectadores”, una atmósfera imposible cuando el vínculo está mediado por una pantalla.
Ch.C.
