El padre Mauricio Scoltore informó que comenzarán hoy los primeros trabajos contra la humedad del templo parroquial, que consistirá en colocar unas máquinas a tal efecto, que tienen un costo elevado pero que con fondos propios la iglesia local hará frente.
Llegó el día del punto de arranque para refaccionar el templo parroquial…
– Esto es seguir dando pasos que están dentro de una lógica pensada, primero fue encontrar a la Fundación Cultural Patrimonio, la visita que recibimos el 21 de octubre, y desde ese relevamiento los arquitectos plantearon tres pasos a seguir, el primero era la instalación de los equipos deshumidificadores de cimiento, que son de tecnología alemana y que venden tres empresas en el país, y nos sugirieron que lo hiciéramos al margen de toda licitación y gestión de fondos de gobierno. Vimos que no era barato pero sí posible, y hoy nos colocarán dos equipos de acuerdo a las dimensiones del templo y los salones parroquiales para atacar la humedad de cimiento de toda la superficie parroquial.
El costo total son 980 mil pesos para pagar en cuatro cuotas, una al momento de la instalación y el resto a 30, 60 y 90 días. Esto con la generosidad de la gente y fondos propios parroquiales lo vamos a encarar, y esperemos que el 17 de febrero, cuando vengan los técnicos, que el resultado haya sido bueno. Estiman más o menos un año de funcionamiento de los aparatos para que se note bien el secado de los muros. Este es el primer paso.
Con la colocación de estos aparatos la Parroquia no queda inutilizada…
– No, son dos aparatos de dimensiones no muy grandes que se colocan en la sacristía o en la secretaría, con sensores en los muros. Hoy a las 9 horas estarán acá, se coloca esto y se van, y tres meses después vienen a ver cómo está funcionando. Y hay testeos al año, a los dos años; los aparatos tienen 10 años de garantía y tenemos el compromiso de la empresa de seguir monitoreando todo para ver cómo funciona.
Luego vendrá la etapa en que vengan técnicos especializados a hacer un listado de averías y ver qué solución merecen. Con ese listado de averías y el proyecto de restauración se hará la licitación.
¿Cómo tienen que hacer los bolivarenses que quieran colaborar para afrontar estos pagos?
– Ahora tenemos que afrontar el pago de la instalación y las tres cuotas siguientes. La Parroquia tiene una cuenta corriente a la que se puede donar por transferencia si la gente desea o acercar el dinero a la iglesia para ayudarnos en eso. Tengo gran confianza en la providencia y tengo estimado que al haber firmado el contrato con la empresa es porque no estamos agarrados del pincel, sino que de algún modo u otro se va a poder pagar.
Angel Pesce
