Colaboración Teresa de los Angeles Turrión (Teresita)
La lectura no debe ser obligatoria.
El placer no es obligatorio; el placer es algo buscado.
Jorge Luis Borges
La lectura comienza a adquirirse desde temprana edad y se mantiene durante toda la vida.
A través de la lectura el ser humano recibe conocimientos.
La lectura es un ejercicio mental.
Para leer son necesarios varios procesos mentales: razonamiento, memoria y percepción.
Hace años la ciencia comprobó que al leer, se activa el hemisferio izquierdo del cerebro, parte que se encarga del razonamiento lógico y de las capacidades analíticas del individuo.
Además, al decodificar letras, palabras, frases y oraciones de un texto se aceleran zonas de la corteza del cerebro que permiten distinguir la semántica y el significado de las palabras.
La parte frontal motora permite recordar sonidos. El hipocampo y el lóbulo temporal medial activan al hipocampo.
La lectura admite leer frases, interpretarlas y de esa manera evocar recuerdos, colores, sonidos, aromas, memorias de nuestras mente.
El leer hace a la persona más inteligente al mejor la concentración y la memoria. Le da oportunidad para destacarse. Lo estimula mentalmente. Le amplía el vocabulario. Lo divierte.
Se recomienda leer al año por lo menos 30 libros.
1 libro por semana;
3 horas por día de lectura;
2 días a la semana;
1 día al mes.
Se lee para pasar el tiempo y para aprender.
Los libros que se pueden leer se clasifican en libros de desarrollo personal, de educación, para tener éxito en la profesión y / o trabajo, publicaciones, diarios, biografías, autobiografías.
Los libros de novelas, cuentos y revistas son de entretenimiento.
La lectura en forma cotidiana beneficia la salud previniendo la depresión, el estrés, la demencia.
La lectura aumenta la confianza, la toma de decisiones, el bienestar. Ayuda a conciliar el sueño.
Por todo lo expuesto se deduce que la práctica de lectura frecuente implica atención, concentración y reflexión. Elementos que motivan a un óptimo desempeño y óptimos resultados.
Uno llega a ser grande
No por lo que escribe
sino por lo que Lee.
Jorge Luis Borges
