El descarte de los bidones vacíos que contuvieron productos agroquímicos son una preocupación permanente de autoridades sanitarias, empresas agropecuarias y del propio productor, todos ellos conscientes de la necesidad de asegurar que los residuos químicos no contaminen el medio ambiente ni afecten la salud de los propios manipuladores.
Por ello, a lo largo de muchos años se han venido desarrollando acciones y planificando estrategias tendientes, precisamente, a minimizar esos efectos y eliminarlos en la medida de lo posible.
En línea con estos postulados, el municipio local ha implementado la ley nacional en la materia y dispuesto la instalación de un CAT (Centro de Almacenamiento Transitorio), que desde hace un par de meses ya funciona en el predio de la Planta de Reciclado de Residuos. Se trata de un galpón dotado de personal, donde los productores pueden llevar sus bidones vacíos. Allí se los almacena, se los clasifica y categoriza y, cuando la capacidad del lugar así lo amerita, la empresa Campo Limpio los retira para finalizar con ellos el proceso correspondiente.
Alfredo Alzueta, presidente de la Regional de AAPRESID, explicó a este medio que estos envases deben cumplir, previamente, con el proceso de triple lavado e inutilización, en manos de los propios aplicadores de los productos. Luego, ya en el CAT, se los clasifica y aquellos que sean susceptibles de reciclado pasan a esa instancia, en manos de Campo Limpio, compañía que se asegura que ninguno de ellos se constituya en materia prima para nuevos contenedores que envasen alimentos, productos farmacéuticos o juguetes para niños, por ejemplo.
Alzueta informó que AAPRESID junto a la Cooperativa Agropecuaria de Bolívar generó la idea de darle difusión a este trabajo que asumió la Municipalidad de Bolívar y, en función de ello, programan una jornada abierta para el próximo 26 de Abril, durante la cual se darán detalles precisos de estas acciones y propósitos, esperando contar con importante afluencia de productores agropecuarios, destinatarios principales de las mismas.
El reconocido productor local también reseñó que, hasta la instalación de este CAT, “no teníamos un lugar donde almacenar estos envases y sólo podíamos hacer en los campos el proceso de triple lavado e inutilización (rotura del fondo). Pero luego los bidones quedaban en el propio campo hasta que, como toda acción posible, se los incineraba, con el consecuente daño ecológico que ello causa” y, en ese sentido, enfatizó en la importancia de la puesta en marcha de estas nuevas estrategias.
Andrea Navarro, perteneciente a la Dirección de Medio Ambiente del Municipio, también presente durante la charla periodística, dijo que el lugar destinado tiene, en principio, una capacidad de alojamiento de unos 5000 bidones. “Los que se ven embolsados son categoría B, que son los que van a destino final y no pueden ser reciclados. Seguramente ingresarán otros que puedan ser categorizados como A. Todos ellos son retirados por Campo Limpio cuando se llega a un número aproximado a los 3000 (ahora hay 900 alojados) y ellos son los que aplican sobre los envases los procedimientos adecuados”.
Andrea explicó que Campo Limpio es una asociación privada que firmó con el municipio un convenio de operación del CAT y ellos son, consecuentemente, quienes aplican este modelo de gestión.
Como ya se dijo, AAPRESID y la Cooperativa Agropecuaria están interesados como entidades en dar difusión a esta importante labor. La ingeniera Soledad Rago, del staff de la cooperativa local, dijo a este medio que es importante la toma de conciencia sobre el tema y que “todo es una cuestión generacional. En general las generaciones mayores no son muy proclives a estos cuidados. Nosotros como institución tenemos que tratar de transmitir conductas. Empezamos por aquí, luego seguiremos por lo que es la huella de carbono y otras que aquí, en Bolívar, hoy no están implementadas para nada”.
Alzueta finalizó el diálogo con LA MAÑANA insistiendo en la necesidad de tomar conciencia acerca de la problemática en análisis que, de alguna manera, es el final de una cadena de utilización de productos que va en crecimiento, juntamente con el propio crecimiento y modernización de la actividad agropecuaria. “Hoy está todo muy estudiado, hay productos que ya no se utilizan más, que han sido prohibidos. Me refiero a los que usaban nuestros padres, por ejemplo. Se ha bajado mucho la toxicidad de muchos de los que se usan; pero debemos ser muy efectivos con el descarte de los envases vacíos. No sólo los bidones, sino las bolsas, las cajas, etc.” En ese sentido, volvió a destacar la importancia de la determinación de la Municipalidad de Bolívar, que habilitó el CAT y dispuso una dotación de personal para su atención. “Como instituciones, nos haremos cargo de la tarea de difusión y concientización, dijo Alzueta, remarcando la importancia de la jornada que se desarrollará el 26 de Abril.
