El dato es por demás elocuente y marca la virulencia de la segunda ola de COVID 19 en relación a la contagiosidad ya que es la primera vez, desde el inicio de la pandemia con impacto local, que Bolívar supera los 700 contagiados activos y, esta vez, con la incidencia que debe otorgársele a las 6686 vacunas ya aplicadas.

Son, hasta ayer, 3207 los casos confirmados, de los cuales 2448 ya se recuperaron y 28 los fallecimientos informados desde el 24 de noviembre del año pasado, cuando un interno de la Unidad 17 de Urdampilleta falleció en el hospital local transformándose en el primer fallecimiento oficialmente declarado por COVID 19. De tal modo, la tasa de letalidad en Bolívar se ubica en un guarismo inferior al 1 por ciento (0,87 %), muy por debajo de lo que sucede en otras partes de la provincia y a nivel país. De los 28 decesos, 20 fueron hombres y 8 mujeres. Se registran solamente dos casos de personas jóvenes (una mujer de 41 años y un hombre de 40), en tanto que las otras 26 muertes ocurrieron en personas mayores de 64 años, discriminados de la siguiente manera: de 64 a 70 años, 6 fallecidos; 10 en el rango de entre 70 y 80; 6 muertos entre 80 y 90 años y 4 mayores de 90.

 La tasa de positividad superó ayer el 33 por ciento, al haberse estudiado 251 muestras en el Laboratorio de Biología Molecular Municipal. De conformidad al mismo parte oficial, es significativo el número de personas jóvenes contagiadas, hecho que se viene repitiendo en los últimos días y que puede explicarse, entre otros factores, por la efectividad de la vacunación en marcha centrada en mayores de 60 años.