Repartida con gusto entre Vetales, Interior Profundo (su prioridad) y su intenso renacimiento teatral, la cantante y actriz (ella aún no asume ser tal cosa) Clara ‘Flaca’ Tiani nos revela las aristas de un presente artístico rico en nuevos sabores, y otros recuperados.

¿Las Vetales volvieron para quedarse?

-Sí. Habíamos tocado en Bolívar hace cuatro años, en el patio de Cultura. Armamos nosotros esa fecha, con cantina y todo. Volvíamos tres de una banda que supo contener entre cinco y siete personas, una banda femenina para tocar Beatles.

El ahora trío fue el primer proyecto musical de la cantante Clara Tiani. A su regreso de Baires, donde cursaba la carrera de Diseño de Imagen y Sonido, la azuleña se radicó en Olavarría y se puso a estudiar Música. Paralelamente armó con colegas la primera encarnación de Vetales, circa 2009. Así, la ‘Flaca’ también dibujaba su rumbo artístico, ya que sus primeros rudimentos en el oficio que la define en la vida los había hecho en el teatro, disciplina a la que ahora ha vuelto con potencia como miembro de Souvenir, cosa que veremos más adelante en esta entrevista, pero más como una música que hace teatro que como una actriz, según se esmera en aclarar, aunque esté girando por la provincia como protagonista de dos piezas a la par de las hiperkinéticas Nadia Marchione y Lorena Marisol Mega, las ‘madres’ de STF. Antes de establecerse en la city bonaerense que bien podría erigirse en capital mundial del hormigón, Clara apenas tocaba “dos acordes (menos que un punk, que al menos sabe tres)”, confiesa, su encare musical se reducía a unos pocos talleres y no parecía haber una chispa allí. 

Pero tras aquella actuación de Las Vetales en Cultura, no hubo más del combo hasta el sábado pasado, cuando regresó al ruedo desde el culinario salón de Firpo restorán. El trío se completa con Viviana Godoy, en el bajo, y Gabina Gallastegui, en el piano.

¿Por qué volver, qué define que lo de Firpo no haya sido una juntada más?

-Nosotras seguimos en contacto siempre, de hecho durante la pandemia grabamos. Somos amigas. La distancia nos complica la vida (Vivi y Gabina viven en Olavarría, Gallastegui en Sierras Bayas, localidad de ese distrito), pero ahora fuimos tratando de achicar esa lejanía, encontrar momentos, y así logramos confeccionar una lista. Hace unos meses Viviana sacó dos fechas en Olavarría, de las cuales hicimos una sola, pero yo empecé a viajar mucho allá a ensayar. Hay que juntarse, no queda otra, si bien todas tenemos otros proyectos y trabajamos de lo nuestro. Fuimos buscando los huecos, por eso tardamos bastante. Esa fecha que te digo en Olavarría la tramamos durante el verano, calculo.

Ahora pretenden “seguir”, destinarle “también la energía a esto”, si bien “no es fácil armar el repertorio, encarar todo un laburo. Las tres somos re beatleras, tenemos mucho material de ellos tocado, pero si no aceitamos, refrescamos y pulimos esas músicas, van a quedar como las hacíamos en 2010, y no es nuestra idea”, remarcó la vocalista, que también es guitarrista, de múltiples bandas locales, algunas frizadas o ya extintas, tales los casos de Murió la Irma y Chimpancé.

La próxima actuación del trío estallará en un patio cervecero de Daireaux, y planean seguir yirando, con una onda expansiva regional. Cada vez que se pueda, en especial en Olavarría, donde el combo ha establecido base, sumarán músicos del lugar. La idea es que se incorpore como baterista fijo en esa ciudad Roberto ‘Tito’ Roselló, una gloria de la escena olavarriense a un nivel ‘Loco’ Peirano en ese mismo pueblo, o ‘Fratacho’ Di Francisco en el nuestro.

Interior Profundo es el lugar donde quiero vivir

Sin embargo, allende este incipiente desarrollo ‘vetal’, la también frontwoman de la Tupá Gruv, quinteto que no toca desde el ya lejano Me Encanta Bolívar de principios de marzo, no duda en afirmar que su principal proyecto musical hoy se llama Interior Profundo, el trío que comparte con Salvador ‘Rojo’ Agustoni, en bajo y voz, y Eric Unzué Madueña, en batería. De hecho, se presentarán, también después de varios meses, el sábado 10 de septiembre en La Tranquera (vaya celebración de cumpleaños para Tiani), al tiempo que anhelan algo grosso: grabar su primer disco, con un productor porteño y en un estudio de allá (antes, maquetearán canciones en Olavarría).

El contenido no está definido, pero la cantante anticipó a este diario que incluirá el material (o parte) que el trío ha venido trabajando todo este tiempo, y que se encuentra diseminado en grabaciones caseras que circulan en las redes y en plataformas digitales, más piezas que recién están saliendo del horno ‘interior’, y que testearán el 10 del mes que viene en el boliche de Pando. Exclusivamente temas propios, esa fue siempre la impronta del proyecto, y el andarivel por el que le interesa transitar a Tiani hoy, también en lo teatral. A esta altura, la banda que empezó como dúo ya tiene un amasado de más de treinta canciones, enroladas mayormente en el postpunk pero también en el indie y el punk, a lo cual deberán construirle una dirección que dé norte a un disco. Algunas, que no necesariamente tienen por qué desembocar en el álbum, ya clavadas en el los oídos y el corazón de la feligresía rockera vernácula, como Cuero crudo, Interior profundo, Yo revuelvo suciedad, Azul de otoño y Una vez lloré. Parafraseando una letra del trío: ‘todo derrapa desde lo alto, los chicos quieren un disco feliz’, y no justamente porque haga reír, dado que lo de ellos no es el reggae ni la cumbia, nene.

En lo que atañe a su faceta de música, Clara también le pone buenas fichas al Encuentro de cantautores del centro de la provincia que, junto a Roky Cardigans y Santiago Rosario, protagonizará a fines del corriente en Olavarría, y que tiene intenciones de montar también acá.

“Disfruto mucho de hacer teatro así”: obras “vivas”, producciones “propias”

Por otro lado, la cantante que curtió en teatro sus primeros palotes artísticos, de niña y adolescente en Azul, ha regresado a esa arena con una intensidad que podría empujar a pensar que hoy le interesa tanto esa disciplina como la música: como miembro estable de Souvenir Teatro Fugaz protagoniza Las vecinas y Las hormigas (lo nuevo, “literalmente, un suvenir”, calificó), ambas de Lorena Mega, dos obras que conforman un solo espectáculo junto a El duelo (el ‘buque insignia’ de STF), también de Lorena, dando forma a una propuesta artística -dos piezas cortas y el ya citado bocadito o yapa- que agenda un punta de fechas en salas de la provincia e inclusive CABA. Pero no, Clara se ve claramente como una música que además hace teatro, no como una música y actriz. No está partida al medio, porque no se considera una actriz, sino una música. Si bien “disfruto mucho de hacer teatro, y de esta manera: de primera mano, con una autora que admiro mucho (Mega), y dos actrices y un actor (la propia Lorena, Nadia Marchione y Horacio Gustavo Zárate) que también. Jugando todo el tiempo con obras que están vivas, y siendo partes de una producción/cosecha propia que para mí tiene un riesgo más interesante (que abordar textos consagrados), y que incluso me interesa especialmente como público; viajando y conociendo gente y lugares”.

Chino Castro