Pueblos originarios será la nueva denominación, desde el 29 del corriente, de la plaza de la terminal de ómnibus, en reemplazo de Julio Argentino Roca.
Aquí, la mirada de Ana Karina Martínez y Mónica González, del colectivo Mujer Originaria, compañeras en esta lucha de casi una década de Marcos Lede Mendoza, autor del proyecto.
EN TU CARA, MITRE
¿Tiene un sabor especial este reconocimiento, que es hasta moral, por llegar a contramano de estos tiempos en los que el poder ‘oficial’ tiende a borrar o a demonizar a los pueblos originarios?
.González: -Sí. En tiempos adversos resalta más la cuestión de seguir dando la batalla ideológica y cultural por esta visión nueva de la historia y sobre todo de esta parte de la historia de nuestro país, echando luz justamente sobre los actores que la protagonizaron, tanto los nefastos, como Julio Argentino Roca, como los damnificados, que son los pueblos originarios. La idea es que se conozca a Roca y a quienes lo rodeaban generacionalmente, y también a los pueblos originarios con su cultura, su cosmovisión, sus valores, cosas que estuvieron absolutamente tapadas por la visión mitrista de la historia.
¿Qué cambió para que ahora la iniciativa del colectivo Mujer Originaria hallara luz verde? Fueron varios años sin lograr el objetivo, años que eran más favorables a proyectos como el de ustedes…
Martínez: -Sí, esos años, los pasados, eran más favorables. Nosotros pensamos, como grupo, que tenía que darse en esta época. Por más que políticamente el país, y nosotros como pueblos originarios, hoy atravesamos una irrupción sobre nuestras libertades, nuestra cosmovisión y nuestra forma de ser y actuar; sobre nuestros derechos, ya que no se respeta un artículo de la Constitución. Me parece que se tenía que dar en este momento. Nos llamaron de Derechos Humanos municipal para ver qué podíamos hacer con el proyecto, en un tempo en el que la plaza estaba siendo embellecida pero había un nombre que molestaba. A Roca no lo podemos borrar de la historia, pero sí poner blanco sobre negro el mal que hizo. Nos sentimos gratamente acompañados, y además con el sabor de una misión cumplida. Por otra parte, en cada paso que damos recordamos a Olga Garay, esto también es para ella, para don Santos Vega (padre) y para tantos otros que siempre estuvieron relegados del Bolívar que también es originario. (NdR: se analizó denominar al espacio verde en cuestión como plaza Olga Garay; finalmente, la mencionada, bolivarense descendiente de mapuches que falleció hace unos años, será instituida como ‘protectora espiritual’ del lugar.)
UN PAÍS FUNDADO SOBRE UNA HERIDA QUE NO CIERRA
Justamente para no borrar a Roca de la historia se deja el monumento.
González: -Claro. Si bien en un principio se pensó en desmonumentar, luego pudimos ver, conversando sobre todo con amigos mapuches y de otras comunidades originarias, que era mejor emplazarlo y resignificarlo contándole a la gente quién fue. Además de haber sido un presidente y un estadista, que muchos creen que modernizo el país y demás, tuvo muchas otras facetas. Por eso nuestro propósito es mostrar todos sus aspectos oscuros, nefastos, racistas y xenófobos, que en función de esos rasgos personales y políticos de Julio Roca se construyó un modelo de estado y un proyecto de país, sobre la sangre que provocó el genocidio.
Ahora vienen nuevos desafíos para el colectivo…
Martínez: -Sí, la idea es, como muchos vecinos nos propusieron cuando juntábamos las firmas (para apoyar el cambio de denominación de la plaza de la terminal), cambiarle el nombre a la calle Roca. Vemos que no podemos lograr algo así enseguida, lo sabemos, pero la idea es comenzar con el proyecto de decir y visibilizar que hay calles, hay plazas que llevan ese nombre.
Lo de la plaza de la terminal comenzó también como una idea que se hizo proyecto…
-Claro, así fue. Cuando Marcos Lede Mendoza (integrante de Mujer Originaria, periodista y militante social radicado en La Plata) lo trabajó, tenía 17 años (en 2012, aproximadamente, fue presentado al HCD). Obviamente que nosotros apoyamos la iniciativa, porque además venía promovida por nuestro querido maestro Osvaldo Bayer y por Marcelo Valko.
UN BAYER EN EL ACTO, QUIZÁ
Como adelantamos en pasadas ediciones a través de una entrevista con Marcos Lede Mendoza, el acto de cambio de nombre de la plaza se desarrollará el viernes 29 del corriente en el lugar, desde las 18 horas, aproximadamente, organizado por el colectivo Mujer Originaria y la Dirección municipal de Derechos Humanos que conduce Marianela Zanassi. Estará presente el historiador Marcelo Valko, y quizá también Christian Bayer, hijo de Osvaldo.
Chino Castro
