El segundo domingo ruralista de 2022 será recordado como el de la despedida de Fernando Alzueta de su cargo de presidente de la Rural. Este carismático dirigente al que no se lo podrá criticar por falta de autenticidad ni frontalismo. Al que siempre se le reconocerá ser un hombre de esos que se ponen los problemas al hombro y los enfrenta hasta resolverlos. Por eso, luego del almuerzo en El Fogón, los ánimos comenzaron a prepararse para la despedida, que efectivamente tuvo lugar en el palco oficial con las propias palabras de Alzueta, las que le ofreció Horacio Salaverry, presidente de CARBAP presente en la muestra y por los abrazos emocionados de su esposa, autoridades, compañeros de comisión directiva, ex integrantes de la misma y empleados de la institución.
Todo comenzó cuando, anticipándose a los pronósticos, la lluvia empezó a caer sobre la pista central de la Rural, momento en el cual ya el Coro Polifónico de Bolívar había ingresado para entonar Aurora, acompañando el izamiento de la Bandera Nacional por parte de autoridades y la Bonaerense a manos de una delegación de Bomberos Voluntarios.
Luego de la entonación del Himno Nacional Argentino, el padre Mauricio Scoltore brindó su bendición, precedida de un verdadero discurso que trajo escrito, ya que “un cura con micrófono es peligroso”, según dijo en tono de broma.
Mauricio tuvo palabras de elogio a la labor del hombre de campo y dijo que “parece que el campo está varios metros más allá de la maldita grieta”. Recordó a su madre, quien hace 50 años “cantaba con dolor mientras tendía la ropa ´dale, corré ligero, total la nafta la paga el burro del chacarero´ en una alusión enderezada al exaltar la tarea del hombre de campo, siempre esforzada.
En relación a “la grieta” expresó Scoltore que “ya es hora de decir basta, … de disfrutar la riqueza del diálogo maduro y sincero”.
En el final agradeció a “mi amigo Fernando Alzueta por sus años de Presidencia en la Rural, porque siempre las instalaciones estuvieron al servicio de la parroquia. Te vamos a extrañar”, enfatizó.
Tras agradecer a la señora Norma por su trabajo en favor de la “Heladera Comunitaria” oró para que “la virgen gaucha de Luján cubra con su manto celeste y blanco nuestra querida nación”.
Pasado este momento llegaron las instancias de los discurso de rigor, que se reproducen aparte. Fueron oradores Fernando Alzueta y Horacio Salaverry, presidente de CARBAP. Antes de sus palabras Salaverry entregó a Alzueta una bandeja labrada, reconocimiento de la entidad madre y Alzueta obsequió un cuchillo al visitante.
Luego de la instancia protocolar quedó abierta la pista para un espectáculo que cautivó al numeroso público que, a esa hora y a despecho de la lluvia que aún amenazaba intermitentemente, se había congregado a la vera de la pista.
La Escuadra de Arte Ecuestre Pampa Mía y el Ballet Amancay, de Santa Rosa, La Pampa brindaron un magnífico show en el que combinaron la destreza ecuestre con danzas tradicionales.
Cuando la pista central se despejó, toda la actividad se circunscribió a lo sucedido en los galpones de animales, donde los martilleros locales subastaron aves, ovinos y porcinos traídos a la muestra. Mientras tanto sucedía lo propio con los equinos mansos, rematados en la pista central.
