El cambio de las banderas Wipala, en el Centro Cívico y en la plaza Pueblos Originarios (frente a la terminal de ómnibus), fue el último punto de la Semana del Respeto por la Diversidad Cultural, que realizaron el colectivo Mujer Originaria y la Dirección municipal de Derechos Humanos, y que incluyó desde el miércoles los conversatorios de la licenciada en Arte Mirta Millán y el investigador Marcelo Valko, y la presentación del libro Prisioneros de la ciencia, del docente, músico y escritor bolivarense Franco Campo.
Ocurrió el domingo a las 11 de la mañana, en los dos sitios mencionados, simultáneamente.
En el Centro Cívico, se dieron cita integrantes de Mujer Originaria, encabezados por Karina Martínez, que condujo el acto; la secretaria de Gobierno, Fernanda Colombo, y Lorena Palacio, por la municipalidad, y familiares de Santos Vega (padre), un referente local de la lucha de los pueblos originarios para echar luz sobre una verdad histórica silenciada, ocultada o tergiversada por los relatos oficiales que han educado y educan a generaciones de argentinos. Entre ellos, su hijo, Santos Vega, y sus nietos.
VUELA ALTO, QUERIDO CÓNDOR
“Es una fecha especial, en la que siempre destacamos el camino trazado por Olga Garay, y más especial porque esta semana nos dejó nuestro ‘Negrito’, nuestro abuelo más lindo. Estamos muy consternados pero sabemos que voló como un cóndor, con la fuerza que siempre tuvo, con las convicciones de ser un mapuche”, expresó Martínez. Tanto Vega como Garay fueron descendientes de mapuches y fuertes difusores en Bolívar de una cultura que la ‘historia oficial’ ha pretendido borrar. En el caso de Garay, fue entronizada además como cuidadora espiritual’ del espacio verde que hasta fines de marzo del año pasado se denominó Julio Argentino Roca.
Franco Campo, que el jueves presentó Prisioneros de la ciencia, también estuvo presente en el CC. Cabe recordar que no se convocó a la comunidad, ya que los protocolos sanitarios por la pandemia de covid lo desaconsejan.
Todo lo enumerado en el primer párrafo de esta crónica se llevó a cabo en forma virtual, a través de la plataforma Zoom.
El izamiento de la bandera wipala en el Cívico estuvo en manos de Santos Vega, familiares de Vega padre y Fernanda Colombo, secretaria de Gobierno.
La ceremonia fue acompañada con la lectura, por parte de Martínez, de la poesía Wipala, que Santos Vega padre incluyó en uno de sus libros.
“Hoy es un día de duelo, reflexión y también paciencia para muchos, para recordar” el genocidio que se cometió contra los pueblos originarios en nombre de la conquista del futuro y el progreso, lejos de la celebración del Día de la Raza que históricamente propuso el relato oficial de la educación argentina, que ha ido sin embargo girando levemente su eje a partir de militancias como la que estamos narrando aquí. Para los presentes ayer en el CC y en la citada plaza, el 11 de octubre es el último día de libertad de los pueblos originarios, antes de ser masacrados y arrasados por el colonialismo europeo.
“Agradecemos al gobierno municipal, porque son políticas de estado las que nos dejan visibilizar a nuestros hermanos” y la causa que defienden, añadió Karina, ya en el segmento final del breve acto, que cerró con las agradecidas palabras de un conmovido Santos Vega, y con el tradicional saludo al cielo con manos en alto.
La renovación de las Wipala se realiza cada 19 de abril, esta vez se postergó por la cuarentena, que era entonces más dura. El próximo cambio, tanto en el Centro Cívico como en la plaza Pueblos Originarios, tendrá lugar el 19 de abril de 2021.
Chino Castro
