Ayer comenzó el ciclo lectivo 2021 en el partido de Bolívar para los niveles Inicial y Primario, sujeto a los protocolos establecidos en el Plan Jurisdiccional para el regreso seguro a clases de la provincia de Buenos Aires, elaborado desde la Dirección General de Cultura y Educación.
El 17 de febrero ya habían comenzado las primeras experiencias de presencialidad en este contexto de pandemia los alumnos que tuvieron trayectorias discontinuas durante el 2020, proceso que continuará hasta el 31 de marzo.
Los alumnos que volvieron a las escuelas ayer, tras un año de virtualidad en el mejor de los casos -no debemos olvidar que no todos los estudiantes accedieron de manera on line a las clases en 2020, muchos lo hicieron de las más variadas maneras y con las numerosas estrategias que los docentes debieron implementar para garantizar el acceso a la educación de todos los educandos-, lo hicieron siguiendo una serie de pautas normadas, que fueron comunicadas oportunamente a la diferentes familias por los establecimientos educativos de base. De acuerdo a las variables tenidas en cuenta en cada caso, los modelos de presencialidad que se pondrán en práctica son completa, combinada y continuidad pedagógica no presencial.
“Hoy (ayer) comenzaron los niveles Inicial, Primario y la modalidad Especial de manera presencial y de manera virtual las Modalidades PCPS (Centros complementarios), Artística (Escuela de Estética) y Educación Física (CEF). Las diferentes maneras de presencialidad dependen del tamaño del aula, distanciamiento físico, cantidad de estudiantes por sección”, explicó sobre el particular el jefe distrital de Educación, profesor Luciano Villarreal.
“La mayoría de las escuelas rurales llevan adelante la presencialidad completa: las y los estudiantes tienen clases presenciales de lunes a viernes, durante 4 horas, todas las semanas. Por su parte, las escuelas urbanas alternan entre la presencialidad completa y semipresencial o combinada. Las y los estudiantes alternan clases presenciales y actividades educativas no presenciales. Esto se lleva a cabo cuando las aulas no cuentan con el espacio suficiente para asegurar el distanciamiento social y la escuela no posee otros espacios que se puedan usar con este propósito”, puntualizó. Por ejemplo, en el caso de cursos con 30 alumnos, suelen agruparse en dos burbujas de 15 (en nivel Primario y Secundario particularmente), una de las cuáles comenzó esta semana y la otra lo hará la semana que viene. En el caso de Inicial, pueden armarse hasta tres agrupamientos de 10 alumnos, empezando el primero de los grupos esta semana y los otros dos en las venideras.
“Las clases presenciales se organizan en bloques de una duración máxima de 90 minutos, separados entre sí por un tiempo de descanso de al menos 5 minutos. Entre bloques de enseñanza hay un tiempo para el descanso y la higiene personal, donde se debe respetar el distanciamiento físico. Se pautan horarios escalonados de ingreso y salida de la escuela para evitar concentraciones”, prosiguió Villarreal.
“Estudiantes, docentes y auxiliares deben higienizar de manera frecuente sus manos, al menos cada 90 minutos. Los establecimientos educativos cuentan con insumos necesarios para esta tarea”, dijo. No obstante, y de acuerdo al nivel así como el establecimiento educativo en particular, los propios alumnos deben llevar alcohol en gel como parte de los requerimientos para el regreso a clases.
Consultado sobre si las escuelas están en condiciones de recibir a docentes, alumnos y demás personal, Villarreal indicó que “las obras grandes están en proceso de licitación pero igualmente se pudo garantizar la seguridad y el cuidado para el retorno a la presencialidad; las obras menores ya están realizadas”.
El próximo 8 de marzo el es inicio oficial de nivel Secundario, con lo que el grueso de los estudiantes vuelven a los espacios físicos de las escuelas, regresando así a una situación lo más parecida posible a la normalidad.
V.G.
