Contribuyentes de Carlos Casares accionan contra la Municipalidad por la falta de mantenimiento en los caminos rurales, el excesivo aumento de tasas y la ausencia de políticas a largo plazo para encontrar soluciones nada menos que al pésimo estado en el que se encuentran las vías por las que transitan a diario para trabajar, acceder a la salud, la educación y producir.
La falta de obras en los caminos rurales es un hecho grave que se da en la mayoría de los municipios de la provincia de Buenos Aires. Lo que ha llevado alos límites del hartazgo a quienes viven en el interior bonaerense no es sólo el pésimo estado de esos caminos, sino además el aumento de lo que se conoce como “Tasa Vial”, un tributo que cobran las intendencias como contraprestación por el servicio de conservación, mejorado y mantenimiento de esos caminos.
En el partido de Carlos Casares la Tasa Vial aumentó un 134% en relación con el año pasado. El intendente Daniel Stadnik en declaraciones al diario La Nación el 23 de diciembre, dijo que ese aumento, muy por encima del índice inflacionario oficial, se daba porque “El sector agropecuario es al que mejor le ha ido en todo 2022. Hemos trabajado muchísimo en los caminos; hemos trabajado y ellos han podido ver todo lo que hemos gastado en los caminos (…)”.
La reacción de los contribuyentes no se hizo esperar, porque debido a la pésima gestión de obras, sobre todo en relación al escaso o nulo mantenimiento de la red, tras las lluvias de los primeros meses de 2022, la Municipalidad encaró varias labores de urgencia y gastó sumas importantes del presupuesto, pero la gran mayoría de los trabajos fueron ineficaces, insuficientes o tan mal realizados que debieron hacerse más de una vez, indicaron desde fuentes cercanas a los productores.
El año pasado y como consecuencia del estado de abandono de la red vial municipal algunos habitantes de los campos quedaron incomunicados o expuestos a todo tipo de peripecias para salir de sus casas, otros perdieron parte de las cosechas o no pudieron sacarlas. En la zona rural los caminos no son sólo un medio para trasladar la producción, sino que por sobre todo son el único modo de acceso a la salud, la educación y el trabajo, que son derechos elementales de las personas. El malestar es lógico, pagan sumas muy altas por un servicio que no reciben y son testigos del abandono que vive el interior del Partido, continuaron informando.
De momento las acciones son administrativas y rechazan e impugnan la tasa vial por considerarla ilegal, además de desproporcionada e inconstitucional. Los contribuyentes ven cómo aportan su dinero” a un Estado comunal que no da respuestas y si lo hace resultan insuficientes, cuando no inexistentes o inútiles, situación esta última que genera perjuicios al erario público al tener que efectuar labores de emergencia que pretenden, sin demasiado éxito mayoritariamente, subsanar los torpes errores cometidos y no consiguen ni una cosa ni la otra”, según argumentan en la presentación en cuestión.
Con este recurso administrativo, los contribuyentes esperan que la Municipaldad comience a escuchar los reclamos y “a dejar de manejarse de forma arbitraria, sin dar respuestas a las necesidades de toda una comunidad, porque por los caminos -muchos intransitables aún durante esta sequía- se mueven los vecinos, la gente que habita en los campos y los pueblos, los docentes, los prestadores de salud y no únicamente productores, como pretenden imponer desde lo discursivo”.
La medida tomada por contribuyentes casarenses se suma a otras de similar tenor encaradas en el territorio de la provincia de Buenos Aires.
