La noche del viernes sirvió para dar el primer paso en la experiencia piloto que puso en marcha Pisano y sus consejeros. Con protocolos estrictos los restaurantes, pizzerías, heladerías y otros locales gastronómicos pudieron recibir público y brindar sus servicios a puertas abiertas, en una medida que se extenderá durante todo el fin de semana.
Una recorrida periodística efectuada reveló un bajo nivel de afluencia de público, salvadas algunas pocas excepciones.