Cuando Juan Carlos Simón decidió quitar los semáforos de la ciudad y reemplazarlos por las hoy conocidas rotondas, en la Dirección de Parques y Jardines estaba Luis Artola, quien se encargó en aquel momento, mediados de la primera década del 2000, de embellecerlas con flores de estación en las distintas épocas del año. Incluso las flores llegaron al mástil central, algo que pocas veces había ocurrido.
Y es lógico que cada director le da a su área una impronta, y así como Artola embelleció esos puntos de la ciudad con colores y aromas, hoy Arturo Martín, que ocupa el mismo área pero con nombre renovado (Dirección de Paisajes y Paseos Públicos) va tratando de no pasar desapercibido por cada lugar que interviene.
En esta ocasión Arturo con sus operarios estuvo en la rotonda de Av. Calfucurá y 226, y allí observó que delante del cartel en el que se lee “Bolívar” y que es de clara referencia para los viajeros, hay un gran macetón en el piso, que fue pensado en su momento para adornarlo con flores y plantas. Es cierto que la primavera todavía aparece algo lejana y las bajas temperaturas van a tardar en retirarse; pero ya se animó a plantar algunas flores como para que cuando el 21 de septiembre esté entre nosotros ya puedan lucir un cierto tamaño y colorido.
Martín no deja de activar en diferentes frentes. Días atrás se ocupó del tema de las plantas de calle Quintana y 25 de Mayo, que pronto estaría resolviendo la Cooperativa Eléctrica porque las ramas tocan los cables de electricidad. Y en la tarde del jueves también se ocupó de otro reclamo sobre una planta, esta vez en la avenida Pincén, del otro lado de la ruta 226.
Desde su área, Arturo Martín trata de dar respuesta a todos los reclamos que le competen de la manera más rápida posible.
Angel Pesce
