COLUMNISTA. De esto y aquello

Y ahora ya dicen que el país está en marcha hacia su propia mejora, lo cual, es de esperar y así parece. Eso sí, si no hay viento en contra, que por otra parte, a diario se lo ve venir. Es decir, que de no haber inconvenientes la cosa va hacia adelante y dicho de otra manera parece que la cosa no es otra que el dólar que desde hace más de medio siglo es lo único que importa y es curiosamente lo único que por lo regular siempre anda al revés de lo esperable, que sirva para todos. Ni muy alto ni muy bajo que vendría a ser como está ahora. Que por otra parte arriba o abajo siempre les viene bien a los que los ponen a ese precio, porque ya se ha dicho que no anda solo, el dólar, claro; hace lo que le mandan y por si fuera poco es muy obediente, el dólar, claro.

Que desde mi punto de vista y sin saber economía, pues debería estar fijo y a trabajar todos de una buena vez. Hace dos o tres días y dado que estamos en plan de comicios apareció en la prensa, eso sí, como algo secundario, total, parece no importante, aunque se escribía que es necesario empezar a hacer obra; pero decía bien claro, los que quieran invertir. Pues al parecer a Milei no le interesa, ni le convence metido en sus números, que quien comience a dar trabajo sea el Estado. Y cabe recordar que ninguno de sus amigos o no amigos, pero que podrían invertir, no aparecen ni por asomo. O sea lo de siempre que para invertir tiene que haber enjuagues. Cono ha sido la norma.

Que es lo que está pasando desde hace muchos meses con las votaciones en el Congreso, que son muy caras; y hasta ahora no se ve que sirvan para algo, amén de mucho para no muchos. De todas maneras a fuer de lo que dicen las encuestas la misión libertaria está aprobada a pesar de lo que se está pasando, o lo que pasan algunos, porque desde hace un añito ya pasaron a otra banda y no precisamente a la Oriental de los vecinos, sino la que altera el futuro. Que dos años esperando no es broma y se cayeron de la franja.

Y en consecuencia siempre se estudia porqué el argentino durante más de medio siglo siempre espera algo de la economía aunque por lo regular casi se podría decir que todo. Y razones hay; porque así ha sido siempre. Y es que sin eso resuelto, no se puede pensar ni en democracia ni en dictaduras. Y para más inri siempre se ha vivido mejor con los militares, al menos los que no se metían en nada pero a fuerza de ser sinceros se podría decir que por lo regular quienes no lo pasaban bien eran los que les señalaban los civiles a los militares; a la manera de los perros de caza que se paran y miran y les falta hablar, pero el idioma está en el cuerpo quieto. Y así es se comía bien y a algunos les aquietaban el cuerpo.

El partido radical que ya es más que centenario es el único que causa pena mirarlo; y ver, que no sabe darse sentido porque en primer lugar se ha dado como dirigentes a los sinsentido y peor aún a un presidente que como se viene diciendo en esta página hace varios añitos es un peronista y de lo peor.

Y para decirlo con más soltura un arribista. Pero el partido dentro de las idas, vueltas y revueltas puede reinventarlo desde las mismas bases pues por el país hay miles y miles de radicales ya mayorcitos que no saben por dónde ir, pero si desde arriba, por los buenos que todavía hay, salen buenas directivas el radicalismo se reconstruye enseguida. Pues hay mucha muchísima gente que no ve el futuro con lo que hay que por otra parte es todo partes de los tres o cuatro partidos que andan dando vueltas. En una palabra que el radicalismo aupado por los viejos radicales es la herramienta política necesaria para que no se tuerza lo que hay; y asuma mayor sentido y para todos pues hasta ahora se trabaja nada más que para la causa de la casta aunque se diga lo contrario.

No deja de ser curioso, que todos son buenos cuando se mueren, Y así sido por lo regular. Para muestra el Papa argentino que cuando fue ungido no lo quiso nadie de derechas a nivel mundial, con Bolívar incluido; y dicho de otra manera nunca lo quisieron y mucho menos al principio, al punto que lo decían sin pelos en la lengua o sin problema alguno. O sea, que no mentían y poco importaba lo celestial.. También es cierto que muchos de ellos por el mundo han hecho lo posible y hasta lo imposible por estar en la foto; y ni que decir de importantísimos peronistas que antes y después se han desvivido por llegar a Madrid o a Roma. Pero lo que veo en este Papa, y es lo que importa, que ha preferido la tierra al cielo; y en la tierra se enamoró de lo peor, y de manera altamente contradictoria, pues justamente asistía a los hacedores de pobres. Que por otra parte son cosas que nunca se entienden, porque si algo me llamó siempre la atención en este señor, cuando se llamaba Bergoglio, es la inconmensurable cultura que portaba. Y sin embargo, poco o nada le importaba estar con lo peor. Lo cierto que creas o no creas, la cultura que tenemos y por suerte nada desdeñable, corretea siempre por dentro y por los alrededores de la Iglesia que a mí, en definitiva, es lo que más me interesa; pues de ella me he nutrido desde niño y como un gran tesoro la tengo. Que descanse en paz después de tanta guerra.