4 de febrero de 2025
Tironeada porque "la problemática y temáticas con las que trabajamos son blanco de ataques del gobierno nacional", y porque "en un contexto de crisis social todas las violencias se incrementan", la Dirección de DD. HH. seguirá, sustentada por la "clara intención del Ejecutivo y el intendente", bregando por "fortalecer" las áreas y programas que la componen.
por
Chino Castro
¿Cómo viene el año?
Marianela Zanassi, directora del área: -Se terminó
enero, que muchas veces
es un mes de tiempo para
reflexionar o rearmar, en
este contexto no ha sido
así o sea que el año ya
arrancó desde el día 1.
Lo que vemos como equipo es que será un año de mucha actividad, de arduo trabajo. Tuvimos como muestra de eso el 2024, porque la problemática y las temáticas con las que trabajamos han estado en el centro de la escena, y siendo blanco de muchos ataques por parte del gobierno nacional. Y al mismo tiempo, en un contexto de crisis social como el que estamos viviendo, las violencias se han incrementado y tienden a profundizarse, todo tipo de violencias, no solo las de género. Entonces será un año de mucho trabajo pero también de mucha acción, en lo referente al gobierno municipal y a las políticas públicas en materia de género y derechos humanos que hemos podido construir en Bolívar. Digo que hay una clara intención del intendente y del Ejecutivo municipal de que estos espacios sigan y se fortalezcan, más allá del contexto y de las complejidades, y que las personas encuentren una respuesta, una contención, cuando se enfrenten a una dificultad del tipo de las que nosotros abordamos.
"Hay que trabajar con los varones, esa es la manera de erradicar la violencia de género"
¿En un contexto así pueden proyectar algo o la urgencia se los devora?
- La temática de derechos
humanos y género comienza a ser trabajada
acá en el gobierno municipal a partir de 2011. Iniciamos ahí un recorrido para
armar la estructura municipal, justamente se cumplen estos días ocho años
de la creación de la Dirección, con el rango institucional que tiene que tener
este espacio. Y desde allí,
ligado a cómo se va complejizando la problemática
con la que trabajamos,
fuimos tratando de idear,
adecuar y también jerarquizar la estructura municipal. (A propósito: desde
este año la cartera dirigida por Zanassi pasó por
organigrama municipal a
integrar la Secretaría de
Relaciones con la Comunidad).
Hace ocho años, cuando comenzamos, existía solo el abordaje a mujeres, aquel 2017 en que a niveles provincial y nacional no había absolutamente nada al respecto. Similar a actualmente, pero ahora es aún peor: el desguace es más rápido y más violento. En aquel entonces no había referencias nacionales ni provinciales, ni programas, cuando acá se creaba la Dirección. Y había una mirada de las violencias que no incluía el trabajo con varones. Hoy, 2025, la Dirección de Políticas de Género, Derechos Humanos y Fortalecimiento Comunitario cuenta con un área de género a cargo de Celina Manghi, profesional de Psicología que ha acompañado y fortalecido el trabajo de todo el equipo interdisciplinario; el dispositivo de Protección Integral, también inaugurado en 2017 y con equipo de trabajo propio; un programa de abordaje de las masculinidades, algo nuevo, a cargo de Laura Berardo, también con equipo propio y que trabaja con los varones porque entendemos y entendimos, no sin el acompañamiento del Ministerio de las Mujeres de la provincia, que hay que hacer con ellos, porque esa es la manera de erradicar las violencias por razones de género. Disponemos también de equipo de acompañamiento de las salidas de la violencia, que también es nuevo. En los últimos años, a nivel provincial al menos, pudimos pensar que las mujeres en situación de violencia no sólo tienen derecho a salir de ella, sino que el Estado debe acompañarlas, armar proyectos libres de violencia.
Hubo un montón de programas que generaron financiamiento para los municipios, pero eso también produce trabajo para quienes formamos parte de las áreas municipales, y hubo entonces que gestar estructura para llevar adelante todopunto a atacar por parte del gobierno nacional. Hay un odio, una tirria y un destrato, que subyacen patentemente en esta idea que manifiestan de que el Estado debe ser exterminado. Y es peor con quienes trabajamos en género y diversida eso. Este equipo ha trabajado con el programa Comunidades sin Violencia; con Cooperativas de mujeres, por ejemplo con el grupo de chicas que está al frente del bufet de la terminal de micros, y con el grupo pre cooperativo, el núcleo textil de mujeres proyectando futuro, que funciona acá en Casa Abierta, y con un área de promoción referida a derechos humanos, en la que hemos sostenido líneas de trabajo y acción todo estos años, que, otra vez, como en 2017, son el blanco de discursos de odio, de ataques constantes, algo terrible en materia de derechos humanos estamos viviendo.
¿Pueden sostener todos
esos programas, áreas
y equipos sin respaldo
económico del Estado
nacional?
- Es importante decir que
el sostenimiento de esta
Dirección, y su creación,
son íntegramente municipales. Somos veinticuatro
personas en esta Dirección. Y ese sostenimiento
forma parte de un esfuerzo y de la convicción de
que estas áreas deben
existir. Hay tres líneas de
trabajo, contempladas por los programas provinciales: el sostenimiento
de equipos, la refacción
de espacios edilicios, y
el impulso de emprendimientos productivos.
Con la de refacción de
espacios, pudimos venirnos a esta Casa Abierta;
luego usamos las líneas de emprendimientos productivos, con las que gestamos el núcleo textil que
recién mencionaba y la
explotación del buffet de
la terminal. Y desde el Ministerio nos insistían para
que empleemos la línea 1,
contratación de personal,
pero por suerte no la necesitamos porque con la
cautela que hay que tener
en cuanto al manejo de
los recursos públicos, pudimos fortalecer nuestros
equipos con recursos municipales.
Hay que decirlo, en un contexto en el que, en general, el trabajador/a del Estado constituye otro punto a atacar por parte del gobierno nacional. Hay un odio, una tirria y un destrato, que subyacen patentemente en esta idea que manifiestan de que el Estado debe ser exterminado. Y es peor con quienes trabajamos en género y diversidades: está bajo fuego la temática, sos trabajador del Estado y de contra te dedicás a asuntos que para ellos sobran. Al final del día, es muy difícil trabajar en esto... Hay que cuidarse, lo hablamos cotidianamente con las compañeras, fortalecerse, fortalecer los equipos, ya que la tarea es ardua y dolorosa. Sin embargo, una cumple con su labor y está convencida de que esta temática debe ser atendida por el Estado y reconocida socialmente.